6 de diciembre, 2013.

Foto: Diario El Pais

Mandela, el gran líder sudafricano, símbolo de la lucha contra el apartheid, murió hace unas horas. Su ausencia enluta el mundo, ensancha el silencio pero redobla la inspiración de luchar por un mundo mejor. Su ejemplo, valentía, dignidad e inclaudicable tenacidad nos refuerza“el ideal de una sociedad democrática y libre en la cual todas las personas puedan vivir en armonía y con igualdad de oportunidades”[1]. Desde la Procuración Penitenciaria de la Nación rendimos nuestro más sentido homenaje a uno de los grandes hombres de la humanidad.

[1] Frase enunciada por Nelson Mandela el 20 de abril de 1964, cuando era juzgado y enfrentaba una posible pena de muerte.