Querellas
La facultad de asumir el carácter de querellante en procesos criminales constituye -quizá- la principal innovación introducida por la ley 25.875 con relación a las que habitualmente ostentan los ombudsman o defensores del pueblo, tanto en el ámbito nacional como internacional. En el año 2007, esa facultad comienza a ser ejercida por el Procurador Penitenciario.
Para exponer las motivaciones o “criterio” que ha justificado el ejercicio de tal facultad, resulta inevitable referirse a las particularidades de los casos concretos en que ha sido utilizada, cuyos principales aspectos se describen a continuación