21 de Septiembre, 2018.
Desde la Procuración Penitenciaria de la Nación saludamos a las personas privadas de su libertad que diariamente asisten a las aulas de los establecimientos penitenciarios en pos de aprender y superarse.
El único derecho que pierde una persona detenida, es el de la libertad. Por eso desde la PPN acompañamos a detenidos y detenidas que a pesar de encontrarse en contexto de encierro, deciden acceder al sistema educativo en todos sus niveles. El derecho a la educación, contemplado en la Ley 26.206, incluye el acceso a una biblioteca, cursos, actividades culturales y educación formal en todos los niveles y modalidades.
Las personas privadas de su libertad constituyen un colectivo en estado de vulnerabilidad. La educación, en sentido amplio, representa una de las herramientas disponibles para el desarrollo pleno de las personas. Esto es desde la adquisición de una formación básica, el desarrollo de competencias laborales, hasta la integración y disponibilidad de sus propios recursos personales. Este proceso no solo no debe sufrir interrupciones en el ámbito carcelario sino que por el contrario debe ser potenciado.
El derecho a la educación no se encuentra amparado solo por la ley nacional, sino también por las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos que expresa en su cuarto punto lo siguiente:
“(…) las administraciones penitenciarias y otras autoridades competentes deberán ofrecer educación, formación profesional y trabajo, así como otras formas de asistencia apropiadas y disponibles, incluidas las de carácter recuperativo, moral, espiritual y social y las basadas en la salud y el deporte. Todos esos programas, actividades y servicios se ofrecerán en atención a las necesidades de tratamiento individuales de los reclusos”
Es por ello que la Procuración Penitenciaria alienta tanto al Servicio Penitenciario como al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y a las Instituciones educativas a continuar y reforzar el acceso a la educación para las personas privadas de la libertad.