13 de Octubre, 2018.
En los últimos quince días, miembros de la Delegación de Cuyo de la Procuración Penitenciaria, realizaron una visita a la Unidad Penal Nº3 “El Borbollón” y el Complejo Federal de Cuyo.
El día 26 de septiembre, el Dr. Diego Moschel, y las Dras. Cynthia Mora y Consuelo Diz realizaron un monitoreo en el nuevo sector de Período de Prueba de la Unidad Penal Nº3 donde actualmente se encuentran alojadas siete mujeres privadas de la libertad en un espacio cuyo cupo es de dieciséis.
La infraestructura del penal es nueva, similar a la de una casa familiar. Cuenta con cuatro habitaciones con cuatro camas cada una y estantes espaciosos para que las detenidas ordenen sus pertenencias. Además, tiene un living comedor amplio con dos sillones, un televisor, una heladera, mesa con sillas y una mesada con anafe. También se constató la existencia de dos baños en buenas condiciones.
En la visita pudieron observar la existencia de un patio delantero con mesas y sillas dispuestas para que las detenidas reciban visitas los días martes, sábado y domingo en el horario de 9 a 17 horas. Asimismo, se inauguraron nuevas oficinas administrativas y un edificio de conserjería.
La segunda visita se realizó el 27 de septiembre en el sector AC1 (que se divide en cuatro módulos) del Complejo Federal de Cuyo, inaugurado parcialmente hace un mes. Solo los primeros tres se encuentran habilitados y en cada uno se alojan veinticuatro personas privadas de la libertad. Quienes han sido trasladados a este nuevo espacio son personas privadas de libertad primarias y procesadas de Boulogne Sur Mer y San Felipe.
El establecimiento cuenta con mesas y sillas, piletas de lavar, duchas e inodoros y doce celdas con dos camastros cada una en dos niveles. Posee calefacción, refrigeración y luminaria acorde. Cada celda cuenta con su propia bacha, repisas y cierre electrónico de las puertas.
El 4 de octubre regresaron al establecimiento para visitar el sector AC2 y allí pudieron constatar que se había otorgado una hora más de apertura de celdas, en tanto posteriormente avanzarán acorde los relevamientos de conducta de los detenidos. En ese sentido, se les otorgaron elementos de higiene y utensilios para cocinar, conforme la solicitud de la Procuración Penitenciaria.
Preocupaciones
El Dr. Moschel y un equipo de abogados de la Delegación, recibieron reclamos por la cantidad de horas de encierro, la falta de actividades recreativas y educativas y problemas con el funcionamiento de los teléfonos de cada módulo. Por tal motivo, se realizaron las solicitudes correspondientes a las autoridades del Servicio Penitenciario Provincial, que provisoriamente administra el complejo.
Además, los procesados alojados en el Complejo mostraron su preocupación ante su futura condena y la posibilidad de que sean trasladados a Almafuerte.
Reducir niveles de hacinamiento y brindar herramientas para el desarrollo intelectual y cultural, son medidas que se direccionan a bajar los niveles de reincidencia beneficiando no solamente a las personas privadas de libertad sino a la sociedad en su conjunto.