26 de Junio, 2019
Desde 1997 se conmemora cada 26 de junio el día Internacional en apoyo de las víctimas de la tortura. Con motivo de dicha evocación, nuestra institución declara una vez más el rechazo de este tipo de prácticas en todas sus manifestaciones y reitera su compromiso con la promoción de la defensa de los derechos humanos de las personas que están privadas de su libertad.
El 26 de junio de 1987 entró en vigor la Convención de las Naciones Unidas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes. Allí se definió, en su artículo primero, que “ …se entenderá por el término "tortura" todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido, o se sospeche que ha cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación, cuando dichos dolores o sufrimientos sean infligidos por un funcionario público u otra persona en el ejercicio de funciones públicas, a instigación suya, o con su consentimiento o aquiescencia…”.
Si bien el uso de esta práctica está absolutamente prohibida tanto por la legislación nacional como por el derecho internacional, la misma sucede en la actualidad en las cárceles federales de nuestro país. Como dato cuantitativo que avala dicha afirmación se menciona que la Procuración Penitenciaria registró 558 casos de torturas y/o malos tratos durante el año 2018.
En función de la entrada en vigor del Protocolo Facultativo del Convenio contra la Tortura, desde el año 2007, el Procurador Penitenciario de la Nación señaló como una de las líneas de trabajo prioritarias, la cuestión de la tortura y los malos tratos.
Este Organismo definió la lucha contra esta práctica concretando varias líneas de trabajo. Se creó el procedimiento para la investigación y documentación eficaz de casos de tortura y malos tratos en base a los principios y criterios del protocolo de Estambul y se inauguró el área de investigación y Documentación de Casos de Tortura y/o Malos tratos. A la vez, se confeccionó un Registro de casos judiciales de tortura y se llevaron adelante investigaciones y monitoreos sobre la tortura en las cárceles federales.
También se creó el Registro Nacional de Casos de Tortura, conjuntamente con la Comisión Provincial por la Memoria y el Instituto de Investigaciones Gino Germani de la UBA. En el año 2017 se registraron, en dicho informe, un total de 1.408 víctimas que permiten la individualización de 5.328 hechos de tortura y/o malos tratos penitenciarios. Allí se suman los relevamientos realizados en las cárceles del SPF y en las de la provincia de Buenos Aires.
Además, la Procuración Penitenciaria ha actuado como parte querellante en varios procesos judiciales por casos de tortura y malos tratos, logrando probar los hechos y la condena de los responsables.
Por su parte, el Procurador Penitenciario es miembro permanente del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura y otros tratos crueles, inhumanos o Degradantes. Con motivo del Día Internacional en apoyo de las victimas de la tortura, la Procuración Penitenciaria de la Nación renueva su compromiso en la lucha contra este fenómeno inhumano.