16 de Septiembre, 2020.

El tribunal Oral Federal de Posadas resolvió favorablemente un incidente de prisión domiciliaria de una joven trans, alojada en el CPF IV de Ezeiza, por encontrarse en una situación de desprotección frente la intersección de vulnerabilidades que la atravesaban durante su detención.

La solicitud fue promovida por el Defensor Público Oficial Eugenio Nicolás Bolotner en razón de que su defendida, de 19 años de edad, sufría sistemáticamente actos discriminatorios y violencia psicológica en virtud de su identidad de género. Asimismo, el argumento transversal del pedido fue la falta de un espacio de alojamiento adecuado para la joven. En su presentación indicó que “Es dable advertir a S.Sa. que, esta defensa trae a su conocimiento una cuestión de extrema vulnerabilidad, toda vez que el SPF no dispone de unidad que aloje personas mujeres transgénero menores de edad. En consecuencia, ante la falta de opciones respetuosas del derecho a la identidad de género de la detenida, la única vía a disposición, compatible con el respeto a la integridad personal y que permitirá el cese de las situaciones discriminatorias, será mediante el uso de la prisión domiciliaria”.

La PPN acompañó el pedido de la defensa presentándose en calidad de “Amigo del Tribunal”, aportando la experiencia de trabajo y el conocimiento del Equipo de Género en esta materia. Siguiendo los argumentos de la Defensa, este organismo dio cuenta que si bien el SPF cuenta con un Programa Específico para Mujeres Trans, no existe una línea de abordaje que contemple las especificidades para el grupo etario de 18 a 21 años, es decir, jóvenes trans. De esta forma, los casos son tratados de forma individual, con criterios excepcionalidad, que no terminan de resolver la compleja situación de discriminación y violencia estructural a la que se ven expuestas.

En la presentación de la PPN, advirtió que la intersección de factores como edad, género y situación de encierro provocaba que la joven se encuentre en una situación de mayor vulnerabilidad, dado que no se encuentran dadas las condiciones materiales para que pueda ser alojada en una cárcel sin que se le vulneren ciertos derechos. Frente a la falta de opciones de alojamiento que sean respetuosas de su identidad de género, estaba posicionada en una situación desigualdad y vulnerabilidad. 

Durante este año, con un esfuerzo conjunto entre la PPN y la Defensoría continuamos presentando informes y notas solicitando la resolución del incidente. Finalmente, se logró una resolución favorable y novedosa, respetuosa de los derechos humanos y con perspectiva en géneros y diversidad sexual.