Durante el primer semestre de 2013 la Procuración Penitenciaria de la Nación analizó la atención de la salud femenina respecto del cáncer de cuello cérvico uterino y detectó una serie de deficiencias frente a las cuales recomendó al Servicio Penitenciario Federal la implementación cabal de los programas de salud interministeriales vigentes para la prevención, diagnóstico, asistencia y tratamiento del cáncer cérvico uterino en las cárceles federales.
La Procuración analizó un conjunto de historias clínicas de mujeres privadas de libertad, varios testimonios sobre el tema y las constancias relativas a la atención y fallecimiento por cáncer de cuello de útero, de una muchacha detenida, durante su encarcelamiento. Sobre esa base, el organismo observó que, si bien existen protocolos interministeriales de las carteras de Salud y de Justicia y Derechos Humanos para la adecuada atención de la salud femenina, estos no se aplican cabalmente en todos los casos. Entre otras falencias, la Procuración notó la defectuosa confección de historias clínicas y una política de prevención deficitaria, en contradicción con los derechos de los pacientes reconocidos en las leyesleyes 26.529 y 26.742.
En función de ello, el 24 de julio de 2013, emitió la Recomendación 795, donde llamó la atención sobre estos problemas e invitó a las autoridades penitenciarias a comprometerse activamente con la implementación de las medidas tendentes a lograr los objetivos ya comprometidos para evitar la muerte por cáncer de cuello de útero en mujeres privadas de libertad, alcanzar el 100% de cobertura de tamizaje y de lograr que el 100% de ellas con lesiones de alto grado reciban tratamiento efectivo dentro de los 6 meses después del diagnóstico.