17 de Junio, 2014.
La Procuración Penitenciaria de la Nación (PPN) expresó su preocupación ante un nuevo fallecimiento de una persona alojada en un establecimiento carcelario.
El 16 de junio de 2014 falleció un joven de 24 años en el Hospital San Martín de La Plata, donde se encontraba internado como consecuencia de las graves lesiones sufridas durante el incendio de su celda en el CPF II de Marcos Paz, el martes anterior.
El fuego habría sido desatado por la propia víctima, como reclamo extremo ante la negativa de la administración penitenciaria a retirarlo del pabellón donde corría grave riesgo su integridad física. El hecho se inserta en un cuadro general de alarmante incremento de los niveles de muertes violentas de personas privadas de su libertad, en especial, de aquellas que resultan consecuencia de incendios.
Desde el 2009 la PPN realiza investigaciones administrativas, exhaustivas e independientes ante cada fallecimiento ocurrido bajo custodia del Servicio Penitenciario Federal, lo que incluye inspecciones en cárceles, entrevistas confidenciales con personas detenidas y familiares y la recolección de documentación administrativa y judicial. A raíz de ello, el organismo ha podido advertir de modo reiterado en sus últimos informes anuales al Congreso de la Nación sobre el considerable aumento de las muertes bajo custodia desde el 2012.
Esta situación persiste durante el 2014, con ya 21 casos registrados en los cinco meses y fracción transcurridos. Desde el 2011 también se notó un incremento alarmante de muertes violentas, problemática con plena vigencia durante el 2014 en curso, con 10 casos registrados hasta el momento.
Desde el 2010, la PPN ha registrado quince casos de fallecimientos como consecuencia de incendios producidos al interior del sistema penitenciario federal, incluyéndose tres en 2014. A la reciente muerte se suma el caso de un joven adulto en el Módulo V del mismo CPF II en enero, y la de un hombre detenido en la Unidad Nº 6 de Rawson en febrero.
La gravedad de los hechos ocurridos recientemente en el Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz vuelve a alertar sobre los elevados e inaceptables niveles de violencia y muerte bajo custodia y la necesidad de instalar generar canales eficaces de comunicación entre las personas detenidos y los agentes penitenciarios y otras autoridades y un plan de prevención e intervención inmediata ante siniestros.