Lauren-Brooke Eisen, Consejera Senior del Programa de Justicia del Centro Brennan de la Universidad de Nueva York, se reunió con funcionarios de nuestro organismo para compartir los hallazgos de su última investigación sobre los factores que han posibilitado en EEUU la reducción del delito en el último tiempo.
La prestigiosa Consejera, presentó los principales hallazgos de su trabajo what caused the crime decline?, que aporta nuevas claves para pensar políticas de seguridad en contra de la tendencia global que promueve medidas de mayor dureza en la sanción de delitos y por ende mayores tasas de encarcelamiento.
La investigación que desarrolló Lauren-Brooke en coautoría con Oliver Roeder y Julia Bowling; prologada por el premio Nobel de Economía, Joseph E. Stiglitz, es un estudio académico y transdisciplinario que indaga sobre el rol del encarcelamiento y su relación con los delitos patrimoniales y el empleo de la violencia.
Tras un rico análisis de diversas variables estadísticas, el estudio llega a la conclusión de que el encarcelamiento ha tenido un efecto prácticamente nulo en la reducción del crimen, mientras otros factores como el uso de determinadas técnicas de gestión policial basada en la utilización de datos, el incremento del ingreso per cápita, la reducción en la ingesta de alcohol, el incremento del personal policial, el envejecimiento de la población y las tasas menores de desempleo son factores que sí han tenido mayor efectividad para una disminución significativa de la criminalidad.
Lauren-Brooke destacó que tras la investigación no se encontró ninguna evidencia que demuestre que los niveles de encarcelamiento que se mantienen hoy sean efectivos; en cambio, “los costos sociales de esta política de encarcelamiento son enormes”. El sistema vigente “cuesta 260 billones de dólares al sistema de justicia criminal cada año y 50 millones al sistema correccional”. Las alarmantes cifras de gastos que implica mantener este sistema de castigo tiene además un enorme impacto social. Se pudo comprobar que “2,7 millones de chicos en EEUU tienen un padre que está en la cárcel y es evidente que existen grandes disparidades raciales en el sistema penitenciario ya que la mayoría de los que están detenidos son jóvenes afroamericanos y ahora también hispanos”.
El encuentro se realizó en el marco de la visita que realizó la investigadora a Buenos Aires, donde fue invitada por Diálogo Abierto del Centro de Extensión de la Universidad de Congreso con la intención de promover una plataforma de discusión sobre temas de agenda social como lo es el debate sobre las estrategias para reducir la inseguridad.